Paradis Beachcomber Golf Resort & Spa es un exclusivo complejo hotelero situado en la península de Le Morne, en Mauricio. Este elegante resort se extiende a lo largo de una playa de arena blanca, ofreciendo vistas impresionantes del océano Índico y la majestuosa montaña Le Morne Brabant, un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El Paradis Beachcomber Golf Resort & Spa es ideal tanto para quienes buscan relajarse como para los amantes del deporte, especialmente del golf. Su campo de golf de 18 hoyos, diseñado por el reconocido arquitecto Robert Trent Jones II, está integrado en un entorno natural sorprendente, ofreciendo una experiencia desafiante para jugadores de todos los niveles. Además, el complejo cuenta con diversas instalaciones deportivas, como canchas de tenis y opciones de deportes acuáticos.
Los huéspedes pueden disfrutar de una variedad de restaurantes que ofrecen una cocina sofisticada, combinando sabores locales e internacionales. El spa, por su parte, proporciona tratamientos revitalizantes, garantizando una experiencia de bienestar completa.
El Paradis Beachcomber Golf Resort & Spa se distingue por su compromiso con un servicio de alta calidad, lo que garantiza una estancia placentera. Con su entorno sereno y actividades diversas, es un destino perfecto para familias, parejas y viajeros que buscan unas vacaciones memorables en un entorno idílico.
Le Morne, en Mauricio, es un destino conocido por su belleza natural y riqueza cultural. Una de las actividades más destacadas es explorar Le Morne Brabant, una montaña que es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO. Ofrece senderismo con vistas impresionantes del océano y la isla. Para los amantes del agua, practicar kitesurf es una opción popular, ya que la zona es famosa por sus vientos constantes y sus aguas claras. También se puede disfrutar de la tranquilidad en las hermosas playas de arena blanca, donde es posible relajarse bajo el sol o nadar en el mar turquesa. La reserva natural de la Península de Le Morne es otro atractivo, ideal para observar la flora y fauna local. Además, se puede experimentar la cultura criolla en los pueblos cercanos, donde es posible degustar la cocina local que incluye una mezcla de influencias africanas, europeas e indianas.