Ascott Makati es un hotel elegante y contemporáneo que se encuentra en el corazón de Manila, ofreciendo a sus huéspedes un ambiente cómodo y sofisticado. Con una ubicación privilegiada en el ajetreado centro comercial, el hotel permite un acceso fácil a diversas tiendas, restaurantes y lugares de entretenimiento, lo que lo convierte en una opción ideal tanto para viajeros de negocios como de placer.
El hotel proporciona una variedad de alojamientos que incluyen suites completamente equipadas, ideal para estancias prolongadas. Cada habitación está diseñada para garantizar una experiencia de descanso placentera, cuentan con cocinas bien equipadas, áreas de trabajo y modernos servicios de entretenimiento. Además, Ascott Makati ofrece diversas comodidades que incluyen una piscina al aire libre, gimnasio y un área de servicios para los huéspedes, lo que añade un nivel extra de conveniencia y confort.
Para quienes buscan reuniones o eventos, Ascott Makati dispone de espacios versátiles y equipados con tecnología moderna, aptos para conferencias y celebraciones. La amabilidad del personal y la atención al detalle contribuyen a crear un ambiente acogedor y profesional que mejora la experiencia del huésped.
En resumen, Ascott Makati se presenta como una opción interesante para quienes visitan Manila, combinando la comodidad del hogar con los servicios de un hotel de calidad, todo en un entorno dinámico y accesible.
Manila ofrece una variedad de actividades interesantes para los visitantes. Al explorar esta vibrante ciudad, uno debe considerar visitar Intramuros, el distrito histórico que alberga antiguas murallas y edificios coloniales, proporcionando una fascinante mirada al pasado colonial de Filipinas. Además, el Parque Rizal es ideal para un paseo tranquilo entre jardines y monumentos, siendo uno de los espacios verdes más icónicos de la ciudad. Para los amantes del arte y la cultura, el Museo Nacional de Filipinas ofrece una rica colección de artefactos y obras maestras que narran la historia y la cultura del país.
El Mercado de Quiapo es un lugar animado donde se puede experimentar el bullicio local y probar delicias filipinas auténticas. En la zona de Binondo, conocido como el barrio chino más antiguo del mundo, se pueden degustar exquisitos platos de la cocina china-filipina. Un recorrido por Malate y Ermita permite disfrutar de la vida nocturna y una variedad de restaurantes con cocinas locales e internacionales.
Manila Bay, conocida por sus impresionantes puestas de sol, ofrece un hermoso paseo marítimo donde se puede disfrutar de una vista relajante. Para quienes estén interesados en la arquitectura y la religión, la Iglesia de San Agustín, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, es una visita obligada. Por último, el Centro Cultural de Filipinas es el lugar perfecto para asistir a una diversidad de espectáculos artísticos que muestran el talento local.