La Costa de Oregón es un destino notable que ofrece una combinación de belleza natural y actividades recreativas. Uno de los aspectos más destacados es explorar los parques estatales, como el Parque Estatal de Ecola, que cuenta con impresionantes vistas del océano y senderos que atraviesan bosques densos. Otro lugar imperdible es el Parque Estatal de Cape Kiwanda, donde se pueden observar acantilados y dunas de arena, ideal para los amantes de la fotografía.
Un viaje a la Costa de Oregón no está completo sin un paseo por sus pueblos costeros. Cabe mencionar a Cannon Beach, famoso por su icónico monolito conocido como Haystack Rock, que es un lugar popular para la observación de aves y actividades en la playa. Manzanita, por otro lado, es un encantador pueblo que ofrece una atmósfera más tranquila y oportunidades para caminar por su hermosa playa.
Los faros históricos son otra atracción imperdible. El Faro de Tillamook Head es uno de los más conocidos y proporciona no solo una vista impresionante, sino también una rica historia marítima. El Faro de Heceta Head es igualmente digno de visita, reconocido como uno de los faros más fotografiados en Estados Unidos.
Para los entusiastas de la naturaleza, el avistamiento de vida silvestre es una actividad apreciada en esta región. La Costa de Oregón es hogar de ballenas grises, especialmente durante su migración, brindando una experiencia única para los visitantes. Finalmente, disfrutar de la gastronomía local es esencial, con muchos restaurantes que ofrecen mariscos frescos, como almejas y cangrejos, que reflejan la riqueza del océano circundante. Así, la Costa de Oregón se presenta como un lugar lleno de opciones para todos los gustos.