En Liège, Bélgica, hay varias actividades interesantes para disfrutar. Uno de los puntos destacados es visitar la Catedral de San Pablo, un ejemplo magnífico de arquitectura gótica donde se encuentra el tesoro de la catedral. Además, el Museo de la Vida Valona ofrece una visión profunda de la cultura y las tradiciones de la región. Un paseo por el Montagne de Bueren permite experimentar una caminata desafiante mientras se disfruta de una vista panorámica de la ciudad al llegar a la cima. Para los amantes de la historia y el arte, el Museo Curtius es un lugar que alberga una extensa colección de artefactos desde la prehistoria hasta el Renacimiento.
Liège también es conocida por su gastronomía. Probar el gaufre de Liège ofrece una experiencia culinaria única, ya que es una especialidad dulce de la región. El mercado dominical de la Batte es otra opción para quienes disfrutan de los mercados al aire libre, ofreciendo una variedad de productos locales y un ambiente animado. Finalmente, un recorrido por el Quartier Outremeuse proporciona una dosis de la vibrante cultura local y la oportunidad de explorar la vida cotidiana de los residentes de Liège.