Cullen, un encantador pueblo en la costa noreste de Escocia, ofrece una variedad de actividades para disfrutar. Una de las atracciones principales es explorar la playa de Cullen, donde se pueden encontrar formaciones rocosas únicas y disfrutar de largas caminatas por la arena. Otro aspecto destacado es recorrer el viaducto de Cullen, que ofrece vistas panorámicas impresionantes de la costa y el paisaje circundante.
El pueblo también es famoso por la sopa Cullen Skink, un plato tradicional escocés elaborado a base de pescado ahumado, patatas y cebolla. Probar esta delicia local en uno de los acogedores cafés o restaurantes del pueblo es una experiencia recomendada. Pasear por el centro del pueblo permite admirar las coloridas casas y conocer las tiendas locales que ofrecen productos artesanales.
Para aquellos interesados en la historia, una visita a Cullen House puede ser fascinante. Este histórico edificio está rodeado de jardines bien cuidados y ofrece una visión del pasado de la región. Por último, los amantes de la naturaleza pueden disfrutar de rutas de senderismo por los paisajes pintorescos y la observación de aves en los alrededores del pueblo. Cullen es ideal para aquellos que buscan una experiencia tranquila y auténtica en Escocia.