Aix-les-Bains es una ciudad encantadora en la región de Saboya, Francia, conocida por sus aguas termales y su entorno natural impresionante. Una de las mejores actividades es visitar el Lago del Bourget, el lago natural más grande de Francia, donde se puede disfrutar de paseos en barco, nadar o simplemente disfrutar de las vistas desde las orillas. La Abadía de Hautecombe, situada a orillas del lago, es un lugar de gran interés histórico y arquitectónico, donde vale la pena explorar su rica historia.
El Casino Grand Cercle ofrece una experiencia más cosmopolita, combinando la posibilidad de disfrutar de juegos con la arquitectura elegante del edificio. Para aquellos interesados en el bienestar, las termas de Aix-les-Bains ofrecen la oportunidad de disfrutar de tratamientos relajantes y aprovechar las propiedades curativas de sus aguas termales.
Un paseo por el centro histórico de la ciudad permite descubrir una rica herencia cultural, con calles pintorescas y edificios que datan de varias épocas. Además, el Parc de Verdure es un espacio verde perfecto para un paseo tranquilo o un picnic.
Por último, el senderismo en las cercanas montañas de los Alpes proporciona una conexión con la naturaleza y ofrece vistas espectaculares del paisaje circundante, siendo una actividad ideal para los amantes de la naturaleza y los deportes al aire libre. Aix-les-Bains ofrece un equilibrio entre la relajación y la exploración, ideal para quienes buscan una experiencia variada en la región.